• Laboratorio Buzz
• On 17/10/2013
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El fútbol ha estado ligado a la publicidad desde sus inicios. Muchas marcas buscan ser los auspiciadores de determinados equipos,  dada la gran exhibición que tienen. Y cómo no va a ser una oportunidad, si uno de los partidos más vistos en la historia fue la semifinal de la Eurocopa 2012 (entre España y Portugal), la cual alcanzó más de dieciocho millones de espectadores.

A partir de la década del setenta,  se  incorporaron las primeras marcas en los clubes de fútbol chilenos. Antes que Cristal, Homecenter o Puma tomaran el monopolio de los auspicios, varias marcas también hicieron de las suyas: Financiera Cash, Conservas Centauros, Pisco Control, Yamaha, Cerveza Condor, Scania, Fiat, Lanchile y varias otras dejaron una estampa en la hinchada de ese entonces (fuente www.ferplei.com)

Cómo olvidar la camiseta de la Universidad de Chile con el LG en su camiseta el 2003. O la recordada camiseta de Colo-Colo de 1986 con el logo de LanChile en su parte delantera. O también, la inmortalizada camiseta de la Universidad Católica de 1996 con el logo de Samsung.

Estas camisetas no solo marcaron un campeonato, sino que también un gran recuerdo en la hinchada que se acercó a dichas marcas al ser los auspiciadores de su equipo.

Hoy en día, muchas marcas pagan grandes sumas de dinero por estar en las camisetas de determinados equipos de fútbol. El 2010, Qatar Foundation  le pagó al Barcelona alrededor de 30 millones de euros anuales por estar en su polera. Esta ha sido la suma más alta que ha pagado una marca por ser el auspiciador de un equipo.